30 julio 2009

happy little girl

so many books, so little time nunca una visita a un amigo que no veo en mucho tiempo resultó tan regia. Me preparó un café riquísimo, me esperó con facturas hasta las 6 de la tarde, nos charlamos la vida, nos reímos de nosotros y oooooopppppiamente de otros, me mostró unos libros tan pero tan geniales que se los quería robar en su propia cara y encima de todo -así como la cerecita en la punta de una megatorta- le compré dos libros que tenía para vender. ni yo podía creer la alegría que tenía. La sensación indescriptible de tener esos libros en la mano me superó tanto de ahora en más trataré de recordar ahorrar algunos pesos para comprarme un libro más y una boludez innecesaria menos. todavía no los empecé, como que los estoy guardando para el momento justo que no tengo idea cuándo es pero sé que ahora no. who knows...

2 comentarios:

GABU dijo...

La importancia de evitar las esas boludeces innecesarias... ;)

P.D.:Tambièn adoro los libros y si tienen perfumito a libro mucho mejor!!!

Ahora,ahorra con toda la voluntàt porque estan carìsimossssssss!!!!

BESITUS CULTIVADOS =)

L.A dijo...

GABU: la importancia de tantas cosas importantes que al principio no parecen tan importantes. guota gel...
sí, ya sé que están carísimos pero siempre se encuentra alguna baratela interesante por ahí.